sábado, 1 de octubre de 2011

Prólogo.

 Mis intentos de huida habían resultado en vano. Él siempre lograba alcanzarme aunque luegue huyese de nuevo y el juego volviese a repetirse. Siempre había sido así. Cuando supe la verdad de lo que yo era me prepararon para casos como el de Jacob. Me preparaban contra su ataque, su defensa, su increíble fuerza y velocidad... Me aconsejaban sobre sus puntos debiles... Una vez más me encontró, una vez más sonrío y una vez más pensé. ``Ojala me hubiesen entrenado para no enamorarme del enemigo...´´

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